Juego de lucha divertido, sencillo y adictivo entre cerditos y lobos feroces

Hoy os traemos el análisis de Iron Snout, un videojuego de acción y lucha desarrollado por el estudio indie lituano SnoutUp Games. Iron Snout es un juego sacado anteriormente en versiones para móviles y ordenadores de sobremesa, pero que se ha portado este año 2019 a consolas de nueva generación como Playstation 4, Xbox One, Nintendo Switch y PS Vita gracias al estudio español Ratalaika Games.

Iron Snout es un juego en el que controlaremos a un cerdo, llamado Iron Snout, el cuál ha aprendido artes marciales para combatir y enfrentarse a hordas de lobos feroces que quieren matar a nuestro querido personaje. Para ello tendrá que combatir por los diferentes niveles para ir avanzando en el juego, y conseguir evitar perder contra las oleadas de enemigos.

Conforme vayas superando niveles, podrás obtener armas para luchar de forma más sencilla contra los lobos feroces, ya que ellos también van equipados con armas para eliminarte más rápido como motosierras, cuchillos, espadas, pelotas o puños… ¡Todo en el combate es válido para salir invicto en la pelea!

En Iron Snout podremos jugar a varios modos de juego: modo clásico, modo muerte súbita, un modo donde sólo podremos recibir un golpe antes de morir, y modo 2 jugadores, para jugar al tenis sin que caiga la pelota, o como los desarrolladores del juego lo llaman en inglés “Wolfieball“. El modo muerte súbita, es un modo de juego sin fin, donde se podrá jugar en 3 áreas únicas, donde podremos poner a prueba todas las habilidades de combate frente a los enemigos. El modo 2 jugadores es ideal para jugar partidas rápidas con amigos cuando vienen a casa.

El apartado gráfico es muy agradable a la vista, ya que se caracteriza por el estilo caricaturas (cartoon) y se junta a la perfección con el toque violento de la sangre. Parece un juego infantil quizás, pero mucho menos de eso, es un juego para adultos, sobre todo por la parte que engloba un cerdito que mata a lobos feroces.

Se puede configurar y cambiar la vestimenta de nuestro personaje de una forma sencilla, para que sea más divertido los combates frente a los lobos.

El único punto que nos ha dejado un sabor de boca algo amargo, es la corta duración del juego, ya que al no tener modo historia, minimiza la duración del título. Al mismo tiempo, al no tener ese punto, puede que cuando avancemos por los niveles y vayamos superando las diferentes hordas de enemigos, se nos haga algo repetitivo el juego, ya que es todo el rato lo mismo.

A pesar de todo esto, Iron Snout me ha recordado a juegos divertidos de antaño como Happy Three Friends, sin tripas pero con mucha sangre.